lunes, 29 de mayo de 2017

Cuando la pasión de desborda

La Tierra de Dios, IZABAL, litoral del atlántico de Guatemala, fue el escenario de un evento que desbordo pasión, una pasión, que solo se logra cuando se ama un deporte, una disciplina o un estilo de vida.

El evento fue organizado por el gimnasio Olimpia, recientemente inaugurado y en manos de un empresario con visión y con responsabilidad  social empresarial, fui invitado para tomar fotos, mi sorpresa fue que cuando llegue había un comité de recepción, que se puso a mi disposición para poder compartir con ellos mis escasos conocimientos con respecto a esta bella disciplina.

Fue un evento con 20 competidores,  eso puso  de manifiesto que el deporte está en crisis, el departamento de Izabal, no tiene asociación departamental, así que la federación no tuvo nada que ver  con el evento y  como en algunas ocasiones los otros jueces piden que se les pague por jueceo, esta vez tampoco se les solicito su apoyo.

El evento inicio al filo de las 19 horas, en la calle con una tarima y sistema de sonido nunca antes visto en los eventos de físico. La gente empezó a llegar, y fue increíble ver como poco a poco los vehículos ya no pudieron pasar.  Cada categoría fue buena, para ser el primer evento del gimnasio tuvo gran aceptación y no es porque yo estaba ahí que fue un éxito.

Fue un éxito porque en el momento del pesaje se le trato al atleta con amabilidad, porque en lugar de un trofeo o una medalla, se le dio un bote de proteína de 5 libras al primer lugar,  de 3 libras al 2  lugar y un bote de creatina para tercer lugar, el primer lugar absoluto gano dos mil quetzales y todos los primeros lugares ganaron un pase para fin de semana en un reconocido hotel de la localidad.

Fue un éxito porque cuando empezó a llover la gente en lugar de irse se quedó y agarraron las sillas y se las pusieron en la cabeza, y gritaban RAFA…RAFA…RAFA… un joven que hace este deporte desde 2013, gano la categoría de 65 kilos en  juegos nacionales  en aquel año, vive con la ilusión de ser seleccionado, pero trabaja todos los días en ese sueño. 

RAFAEL es un claro ejemplo de que cuando se quiere estar limpio, se puede, el dice “si por mi fuera me pinchara, pero no tengo el pisto, si apenas me alcanzo para la comida de esta dieta. No espero nada de nadie, porque si te dan algo después te tratan mal o se creen con derechos sobre tu imagen, y lo único que tengo es mi nombre y siempre lo mantendré lo más limpio posible”.

Lejos de las redes sociales, RAFAEL, estudia derecho, trabaja en una entidad financiera y es personal Training en el Gimnasio Olimpia, Agrega, amo lo que hago, lo que quiero es ser mas grande y sin dejar de ser la persona que soy.


Cuando veo el rostro de Rafael, y el de otros chicos a los cuales él ha preparado me doy cuenta que este deporte tiene futuro y que somos nosotros los adultos los que lo hemos degradado. Yo creo que el rumbo se puede componer, Rafa, Patzan, Erick Sanches, James Castillo, Jhohana Leal Gularte y otros tienen algo en común, un corazón noble y puro para este deporte, y puedo asegurar que cuando lleguen a puestos importantes el resentimiento que hoy algunos líderes tienen no los alcanzara y presagio que brillaran con luz propia, porque su pasión se desborda en el escenario.

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